Qué maravilla en esos días
al fin te vi rozando el agua.
El azul cielo cubrió tu cuerpo
y el sol quería ser tu almohada
La oscuridad de tu ciudad
me dio palabras de amor claro;
qué estimulante poder mirarte
en mi pecera estarás,
siempre estarás …
Toca mi mente cibersirena
y no respires este aire,
seguí danzando en tu escondite
no rompas nunca tu silencio.
Te vi brotar en soledad
cantar canciones que son como
luz sofocante jardín de piedra
entre burbujas estarás,
siempre estarás...
jueves, 18 de diciembre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario